mayo 4, 2024

Escasez de neumáticos: para el dueño de Fate existe “una situación de neo-anarquismo que impide producir”

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Javier Madanes Quintanilla explicó que el paro que afecta a su actividad restringe al mínimo la posibilidad de abastecer al mercado. Se queja del rol pasivo de las autoridades y dice que el gremio quiere decidir cómo funciona la planta: “Ya no es una cuestión ideológica, es una cuestión de racionalidad”.

El nuevo paro de actividades por tres días que afecta a la producción de neumáticos anunciado ayer promete agudizar la escasez y los aumentos de precios, a menudo a niveles exorbitantes. Para el dueño de Fate, Javier Madanes Quintanilla, el panorama no parece encontrar un cauce y existe “una situación de neo-anarquismo” en el que la producción se vuelve inviable, al menos para reactivar su planta industrial de San Fernando, que produce solamente al 40% de su capacidad total.

Al cabo de una jornada en que se hizo evidente la caída de adhesión a un nuevo paro, por el desgaste al cabo de cerca de 120 días de conflicto. La declaración de feriado nacional por parte del Gobierno, a raíz del fallido atentado contra Cristina Kirchner, volvió abstracta la cuestión del paro en la jornada del viernes.

Ello no quita que el conflicto está lejos de ser solucionado. Y las otras dos grandes empresas del sector, Pirelli y Bridgestone, enfrentan un panorama similar. El reclamo sindical, por cuestiones salariales y el régimen de trabajo en el sector, se inició en mayo y en las últimas semanas el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (Sutna) lo escaló con bloqueos a las plantas de neumáticos de Fate, Pirelli y Bridgestone.

La vía judicial no parece haber tenido efecto. “Ante el bloqueo, hicimos la denuncia en una fiscalía. Pero para las autoridades, bloquear el ingreso de una planta industrial durante meses no es cuestionable ni, mucho menos, reprimible. Es solamente una manifestación popular”, ironizó Madanes Quintanilla.

También explicó que el Ministerio de Trabajo “convocó a muchas reuniones, probablemente inútiles para evitar los excesos que estamos sufriendo y nos impiden producir”. Ayer, una audiencia de negociación entre el sindicato y las tres plantas que producen en el país fracasó y derivó en nuevas medidas de fuerza. Las automotrices aseguran que están produciendo al límite.

“Estamos en una situación de neo-anarquismo que nos impide producir. Hay asambleas de 3 o 4 horas de duración, hay turnos completos que no trabajan, hay días de paro. El gremio se considera a sí mismo encargado de definir cómo se maneja la actividad industrial y cómo funciona una planta. No acepta que el modo de producir tiene que ser decidido por la empresa. Y esto no tiene nada que ver con el respeto o no de los derechos laborales”, enfatizó el empresario.